La boda cuarta parte

Mientras tanto, Sylar y Nahuel esperaban en un callejón oscuro, disfrazados con un bigote falso
- esto es una estupidez, ¿Por qué usamos bigotes falsos? –le dijo Nahuel a Sylar
- porque así nadie nos reconocerá, descuida he hecho esto antes – dijo Sylar y el tipo de las licencias llego. Estaban haciendo la transacción cuando de repente…
- ¡alto ahí! – Grito un policía – ¡policía de Zanzíbar! ¡Quedan todos arrestados ¡
- sabes Sylar – le dijo Nahuel a Sylar – algunas veces realmente te odio
En la cárcel de Zanzíbar.
- les digo que yo soy Nahuel, soy su jefe – gritaba Nahuel desde su celda sin embargo nadie le creía pues no podía quitarse el bigote falso y no lo reconocían
- relájate Nahuel, ya encontraremos la forma de salir de aquí– dijo Sylar tratando de armar una llave con un pedazo de alambre. De pronto se oyó una voz familiar
- les digo que la están hipnotizando – gritaba Juan entrando a la cárcel. El oficial abrió la celda donde estaban Sylar y Nahuel y metió ahí a Juan
- ¿a ti por qué te agarraron? – le pregunto Nahuel
- a usted que le importa, señor – dijo Juan sin reconocer a Nahuel por el bigote falso
- Juan, soy Nahuel – dijo
- claro que no, Nahuel no tiene bigote – dijo Juan
- ves te dije que el bigote servía – le dijo Sylar y Nahuel puso cara de enojado – bueno ¿y por qué te agarraron, amigo? – le pregunto Sylar a Juan
- digamos que espié a un tipo y en el momento en que me descubrió trate de matarlo con un plátano que encontré en la basura - dijo Juan
- esto es increíble – dijo Nahuel decepcionado – la boda será en unas horas y el sacerdote está encerrado
- ¿Por qué te preocupas tanto? – dijo Juan completamente despreocupado
- Adri confió en que yo podría hacer que su día especial fuera perfecto, pero ahora sé que he fallado – dijo Nahuel y Sylar y Juan se pusieron comprensivos
- descuida, saldremos de esta – dijo Sylar y sádicamente le arranco el bigote falso a Nahuel
- ¡¡¡¡¡¡Mierda!!!!!!! – Grito Nahuel y el oficial se acerco a la celda al oír el grito – soy el oficial Nahuel, líder de la Agencia de Alguaciles de Texas, déjanos ir o perderás tu trabajo
- sí, señor – dijo el oficial abriendo la celda rápidamente. Solo faltan cuatro horas para la boda: Sylar corrió a vestirse a su casa, Nahuel fue a prepararse pues estaba decidido a casar a Adri aun con la licencia falsa. Pero Juan volvió a la casa del hipnotista gay…

CONTINUARA…..